Rompope casero

En una olla vierte la leche junto con las ramas de canela, anís estrella y clavos de olor. A continuación, deja que hierva suavemente para que se aromatice. Una vez que haya tomado el perfume de la canela, retira del fuego y reserva.

En otra cacerola coloca el azúcar y enciende a fuego medio. Deja que se derrita lentamente hasta formar un caramelo dorado, removiendo con paciencia y utilizando una espátula resistente al calor para evitar que se queme.

Cuando el caramelo tenga un color brillante y uniforme, incorpora de inmediato la leche aromatizada (sin las ramas de canela) y mezcla durante unos minutos hasta que el caramelo se disuelva por completo en la leche.

Aparte en un bowl bate las yemas de los huevos utilizando un batidor de globo.

Vierte poco a poco la leche con caramelo sobre las yemas, siempre removiendo de manera constante para evitar que el calor las coagule.

Una vez integrada toda la mezcla, regresa a la olla y cocina a fuego bajo por un par de minutos removiendo constantemente hasta que sienta cremoso.

Cuando llegue a la temperatura adecuada, retira del fuego y vierte en un recipiente resistente al calor. Añade el ron, mezcla bien y deja enfriar.

Sirve el rompope casero en copas, decorando con una ramita de canela o canela en polvo. ¡Disfruta de esta bebida casera y perfecta para las celebraciones navideñas! Cuéntanos en los comentarios tu opinión y comparte una fotografía del resultado final.

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Historia del rompope casero: de convento a postres mexicanos

Durante el siglo XVII, en el convento de Santa Clara de Puebla, las monjas idearon esta bebida cremosa y la ofrecían en festividades religiosas y a visitantes distinguidos. Con el tiempo, el rompope trascendió los muros conventuales y se instaló en los hogares, convirtiéndose en un clásico inseparable de las celebraciones navideñas. Hoy lo encontramos no solo servido en copas, sino también como base de postres, helados y mousses. Además, su sabor especiado y su textura aterciopelada lo han convertido en un símbolo de la gastronomía mexicana tradicional, apreciado dentro y fuera del país.

Valor nutricional

(por comensal)

• Calorías: 702,5 kcal
• Proteínas: 12,8 g
• Grasas: 15,5 g
• Carbohidratos: 97 g
• Fibra: g